Ante la actual crisis ambiental, las organizaciones del Comité Mexicano de la UICN (CM-UICN) con el objeto de coadyuvar a las acciones de conservación a escala local, regional, nacional y global a favor de la permanencia de los recursos naturales del país, expresa su preocupación ante la situación que enfrenta el sector ambiental mexicano y particularmente a las medidas plasmadas en el Decreto Presidencial por el que se establecen las medidas de austeridad que deberán observar las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, publicado el pasado 23 de abril.

Durante la administración pasada, el sector ambiental sufrió importantes recortes presupuestales (31.32% entre 2013 y 2018) y, lamentablemente, durante la administración actual, esa tendencia ha continuado. Tan solo entre 2018 y 2020, y antes de la pandemia del COVID-19, el recorte al sector ambiental fue de 20.25%. Estos recortes implican un costo cada vez mayor para el país por el agotamiento y la degradación ambiental, equivalente al 4.6% del PIB, cifra que contrasta con un 0.7% de gasto en protección del ambiente.

A esta precaria situación se suma la reducción del 75% del presupuesto disponible de las partidas de servicios generales y materiales y suministros, lo que en el caso de las instituciones del sector ambiental, particularmente de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), no sólo representa poner en riesgo el medio de subsistencia de cientos de familias, sino la imposibilidad de continuar desarrollando su importante labor en beneficio del conocimiento, conservación, restauración, gestión y uso sustentable de nuestro patrimonio natural.

Los recursos naturales de la nación y el empoderamiento de sus principales guardianes (principalmente ejidos, comunidades locales y pueblos indígenas) para la adecuada gestión y aprovechamiento de estos recursos, son dos ejes fundamentales para potenciar el desarrollo económico y la erradicación de la pobreza en México.

Las evaluaciones globales más recientes reiteran que la naturaleza es esencial para nuestra economía, seguridad alimentaria, salud y calidad de vida, y sustentan que en los últimos 50 años ésta ha sufrido cambios sin precedentes en la historia de la humanidad poniendo en riesgo a un millón de especies y el bienestar humano. Ante este panorama, los expertos multidisciplinarios coinciden en que mientras no logremos un cambio profundo de paradigmas que modifique nuestros valores, visiones y patrones de producción y consumo, no lograremos cumplir los compromisos nacionales e internacionales de desarrollo.

Ante esta crisis global de biodiversidad, el trabajo de instituciones como la CONANP y la CONABIO, apoyado y complementado por las organizaciones de la sociedad civil, resulta de gran relevancia para México y el mundo. Ambas instituciones desarrollan actividades que son cruciales para valorar y proteger nuestros recursos más valiosos y para apoyar el desarrollo de las comunidades locales en armonía con la naturaleza.

El artículo 4 constitucional, en su párrafo quinto reconoce el derecho humano al medio ambiente sano para el desarrollo y bienestar. Además, siendo parte del selecto grupo de países megadiversos, que, ocupando el 10% del planeta, albergan en su conjunto el 70% de la biodiversidad del planeta, México tiene un gran compromiso con la humanidad.

Tomando en cuenta que la pérdida de biodiversidad y la reducción de procesos ecológicos aumenta los riesgos de enfermedades zoonóticas (tan sólo en los últimos 40 años, más del 70% de las infecciones emergentes han sido zoonosis) la pandemia del COVID-19 pone en evidencia este estrecho vínculo entre la salud ecosistémica y la salud humana. En este contexto, más que nunca, es necesario invertir en acciones que contribuyan a la conservación de nuestra gran diversidad de ecosistemas en el mediano y largo plazo, mientras se promueve y apoya el desarrollo y bienestar social, particularmente de los pueblos indígenas y comunidades locales, que son quienes custodian nuestra biodiversidad.

Convencidos del incalculable valor de nuestra biodiversidad y reconociendo de que se trata de un asunto de supervivencia y seguridad nacional, las organizaciones firmantes reiteramos nuestro compromiso de continuar apoyando la importante labor de conservar y proteger los recursos naturales de la nación, y solicitamos respetuosamente que el Presidente Andrés Manuel López Obrador y las autoridades ambientales de nuestro país, tomen en cuenta la apremiante situación que vivimos y fortalezcan a las instituciones del sector, particularmente a la CONANP y la CONABIO, para garantizar su importante labor en beneficio del medio ambiente y contribuyendo al desarrollo social y económico de México.

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Cordialmente,

Alejandro Cusi de Iturbide

Presidente Comité Mexicano de la UICN

Organizaciones del Comité Mexicano de la UICN